Cada día, los profesores se embarcan en una travesía única, cargada de responsabilidad y amor por la educación.
En las aulas, más que simples transmisores de información, los docentes son sembradores de sueños. Siembran las semillas del aprendizaje, cuidando con esmero cada brote de curiosidad y creatividad.
Su paciencia es inagotable, detrás de cada lección hay horas de preparación, dedicación.
Detrás de cada sonrisa de un estudiante hay un docente que ha creído en su potencial.
Y detrás de cada logro académico, hay un maestro que ha guiado el camino.
Con este libro he querido rendir homenaje a todos los docentes que han dejado huellas imborrables en nuestras vidas. Su labor es un regalo inestimable para la sociedad, y su influencia perdura mucho más allá del aula.
Gracias por ser faros de inspiración, guías de conocimiento y guardianes de sueños.
“El primer día de cole tenía un nudo en la barriga…Pero, por suerte tú estabas ahí”.
Publica Timunmas en castellano y Estrella Polar en catalán.